Celebraciones por el título de los Dodgers en 2024 terminan en caos en Los Ángeles
Lo que comenzó como una noche de júbilo terminó en caos. El mismo desorden que reinó en la celebración de 2024 contra los Yankees se volvió a apoderar de Los Ángeles la noche del pasado sábado.
Minutos después de que los Dodgers conquistaran su segundo título consecutivo de Serie Mundial al vencer a los Toronto Blue Jays en el Juego 7 disputado en el Rogers Centre de Canadá, cientos de fanáticos tomaron las calles de Los Ángeles para celebrar. Sin embargo, estas celebraciones rápidamente se salieron de control.
De acuerdo con la cadena TMZ Sports y videos en redes sociales, la caótica celebración se extendió desde Pacoima hasta Echo Park y el centro de la ciudad. Las intersecciones se convirtieron en pistas de baile improvisadas, con banderas ondeando, música a todo volumen y fuegos artificiales estallando entre multitudes eufóricas.
No obstante, la situación se deterioró cuando agentes del Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD) fueron atacados con botellas y fuegos artificiales. Esto obligó a las autoridades a responder con gas lacrimógeno y proyectiles no letales para dispersar a los grupos más agresivos.
La tensión llevó al LAPD a declarar una alerta táctica y emitir órdenes de dispersión alrededor de las 12:30 de la madrugada. Uno de los incidentes más llamativos fue el vandalismo a un vehículo autónomo, mientras que varios oficiales resultaron golpeados por objetos lanzados desde la multitud.
Afortunadamente, no se reportaron heridos graves, aunque la escena dejó ventanas de autos destrozadas y calles cubiertas de restos de pirotecnia.
La alcaldesa Karen Bass hizo un llamado a la responsabilidad: “Amamos a nuestros Dodgers, pero no hay excusa para poner en peligro a otros”. Posteriormente, se vio a varias cuadrillas de limpieza que trabajaron durante la madrugada para restaurar el orden, mientras la ciudad intenta equilibrar la euforia deportiva con la necesidad de mantener la seguridad pública.
Doble campeonato, doble caos
La noche del miércoles 30 de octubre y la madrugada del jueves 31 de octubre de 2024 también estuvieron marcadas por disturbios en Los Ángeles, tras la victoria de los Dodgers sobre los New York Yankees.
La celebración se tornó violenta en varias zonas de la ciudad, con saqueos, enfrentamientos con la policía e incluso un autobús incendiado. Las áreas afectadas incluyeron Echo Park, Sunset Boulevard, Whittier Boulevard, el centro de Los Ángeles y los alrededores del Dodger Stadium.
Un autobús de Metro fue rodeado por una multitud hostil y quemado, mientras que se registraron saqueos en tiendas del centro de la ciudad. La policía desplegó equipos antidisturbios y utilizó balas de goma para dispersar a los aficionados.
La ciudad de Los Ángeles enfrenta así el reto de celebrar los éxitos deportivos de sus equipos mientras mantiene la seguridad y el orden público.